“LA VIDA TIENE PARA MI OTRO SIGNIFICADO”
por Tai Jun Mun
Cuando entré al Departamento de Neuro-Cirugía del Hospital Jefferson, hace algunos años, luego de un largo viaje, tenía grandes deseos de mejorar mis conocimientos y aprender los últimos adelantos de la medicina, para poder servir a mis connacionales.
Al mismo tiempo, sentía un gran vacío en mi corazón, que estaba lleno de cicatrices. Yo no conocía a Jesucristo, aunque muchas veces había oído hablar de él. Si bien nací en el seno de una familia budista, tuve poco contacto con el budismo durante mi infancia. En mis años de escolar fui obligado a rendir culto en un santuario sintoista, pero lo hice mecánicamente, sin que interviniera para nada mi corazón.
Al final de la Segunda Guerra Mundial, mi patria fue liberada del dominio militar extranjero, y me encontré ante la necesidad de hacer frente a los rápidos cambios sociales y a dos maneras distintas de pensar: la de la democracia y la del comunismo.
Aunque yo mismo no era un hombre creyente, toda idea que rechazara de plano a Dios me era inaceptable. En la guerra terrible que asoló nuestro hogar, nuestras ciudades y nuestra patria, vi y experimenté muchas cosas terribles que hicieron que llegara a tener un concepto muy bajo de la vida humana. El cambio de panorama y de mi manera de vivir cuando llegué a los Estados Unidos, no lograron eliminar mis cicatrices.
Mi existencia como interno en el Hospital Jefferson, era muy provechosa, pero se hizo tan mecánica y rutinaria, que al comienzo casi perdí hasta la facultad de pensar. Con el pasar del tiempo, aproximándose ya la fecha de mi partida, me dí cuenta que carecía de algo muy importante, aunque yo había hecho considerables progresos en el campo de mi actividad profesional.
Dios mismo me hizo ver la respuesta a mi inquietud, por medio de tres factores importantes: me concedió la oportunidad de trabajar bajo las órdenes de uno de los mejores cristianos que jamás he conocido. Este cirujano me enseñó el verdadero significado de la vida cristiana, por medio de sus palabras, pero más todavía, por medio de su conducta.
En mi trabajo diario del hospital, el Señor me hizo ver que los enfermos necesitaban no sólo de ayuda física, sino de ayuda espiritual. Y como yo no había experimentado todavía el nuevo nacimiento de que nos habla Jesús en el Evangelio, no podía ayudarles a los enfermos más allá de cierto punto.
El Señor me mostró dos clases distintas de enfermos. Cuando a los de una de ellas se les decía que padecían de enfermedades incurables, demostraban tremenda emoción y todas las indicaciones de un quebrantamiento moral.
En cambio, los verdaderos cristianos entre los enfermos aceptaban llenos de gracia, la verdad, y mostraban tranquilidad de espíritu porque sabían que estaban descansando en la voluntad de Dios.
Si bien yo sabía que mi corazón se estaba acercando a Dios, se me presentaban muchas dificultades. A menudo me preguntaba cómo me sería posible creer en cosas que no podía explicar.
Cuando más dudas tuve en mi corazón, el Señor hacía que me sintiese más y más intranquilo e incómodo. Después de horas de oración, por fin me decidí, y acepté a Jesucristo como mi Salvador. Aunque soy un cristiano joven, y me quedan muchos años para crecer en la gracia, siento mayor fortaleza y una perfecta paz de espíritu, desde que hice mi decisión. La vida ahora tiene para mí otro significado.
Estoy pidiéndole al Señor que me guíe en mi vida diaria y en mis actividades profesionales en favor de los pueblos necesitados de
Corea.
ASI CONOCI A CRISTO
por SHEILA GUPTA
Hay camino que parece derecho al hombre, pero su fin es camino de muerte. Proverbios 16.25.
Nací en una familia hindú, de la casta de los Vaishya. Mi madre era una mujer muy religiosa, que seguía todas las tradiciones ortodoxas de su fe. Jamás hubiese aceptado, por ejemplo, beber agua ofrecida por un cristiano. Yo me crié en ese ambiente fanático y cerrado a todo lo que no fuese hindú.
Mis padres deseaban que yo recibiese una educación esmerada, y sólo era posible obtenerla en los colegios cristianos. Asistí a varios de ellos, pero nunca tuve un encuentro cara a cara con el Cristo viviente. Todo lo que pude comprender era que Jesucristo sería para los cristianos, lo que Krishna era para mí. Con todo, no dejaba de agradarme el ambiente solemne que imperaba en las ceremonias religiosas cristianas.
Mi vida espiritual consistía en seguir las tradiciones de mi religión y adorar a las diversas deidades hindúes según lo habían hecho todos mis antepasados. En medio de mis dudas tenía una sola seguridad: que a pesar del conocimiento que yo poseía acerca de mi religión, ella no me daba la paz. Yo buscaba algo que me proporcionase estabilidad, un apoyo en medio de las dificultades de la vida. Y sólo veía a mí alrededor ceguera espiritual, culto idolátrico e hipocresía. Pero, por costumbre, seguía concurriendo a los templos, de los que salía siempre insatisfecha y desilusionada.
Un recuerdo se destaca cuando pienso en los días de mi juventud. Yo era ya estudiante de medicina, y con mi padre y con una hermana menor, visitamos algunos de los templos más famosos del norte de la India. Llegamos a la puerta de uno de ellos, a las dos de la tarde, y no se nos permitió entrar para ver los ídolos, pues los guardianes nos dijeron: “A esta hora, los dioses están durmiendo la siesta”. Recuerdo que pensé inmediatamente: ¿Qué clase de dioses son estos que pueden echarse a dormir tranquilamente? Creo que en ese momento comenzaron a trabajarme en la mente dudas muy serias acerca del valor de mi religión.
Pasaron los años, y con su pasar, aumentó mi intranquilidad. Yo estaba disfrutando de los placeres de este mundo, pero en lo profundo de mi corazón no tenía felicidad alguna. Yo era un alma hambrienta y llena de miserias, que andaba a tientas en las tinieblas, sin encontrar una salida. Cual oveja descarriada, seguía luchando, confiada en mis propias fuerzas, hasta que llegué al punto en que ya no me era posible continuar.
En 1954, se me presentó la oportunidad de ir a la ciudad de Vellore, como miembro del personal médico del Christian Medical
College and Hospital. Acepté con suma satisfacción el nombramiento, pero sólo pensaba en mi prestigio profesional y mis ganancias materiales. Yo sabía que luego de estar un tiempo en un hospital tan célebre, me resultaría fácil obtener cargos importantes. Pero Dios tenía planes completamente distintos para mí.
Mis primeros días en Vellore no fueron nada felices, y en varias ocasiones quise renunciar. Mi confusión mental y espiritual iba en aumento. A fin de escapar del yo, comencé a asistir al cine todas las noches y a leer cuanta literatura sensacionalista y vacía caía en mis manos.
Durante este período de mi vida, una colega australiana vino a residir en la casa de los médicos internos, y su cuarto estaba muy cerca del mío. Nos hicimos amigas, y esta señorita, que era cristiana, comenzó a orar a Dios pidiendo por mi conversión. Un día perdí la paciencia mientras conversaba con ella, y le dije de un modo muy grosero que no debía molestarme más, pues jamás conseguiría que yo me convirtiese. Continué en mi tremenda confusión mental, pero ella siguió orando.
En sus conversaciones conmigo, mi colega muchas veces me había citado las palabras de Jesús, de Apocalipsis 3.20: “He aquí yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo”.
Empezó a sucederme, en este tiempo, algo muy curioso. Comencé a ver continuamente al Señor Jesús, sobre la cruz. Esta cruz me perseguía de día y de noche. Una tarde se me ocurrió leer alguna cosa en mi Biblia, ese libro que había recibido muchos años antes, y que casi nunca había abierto. Las páginas se abrieron en el capítulo 18 del evangelio según San Juan, y comencé a leer el relato de la crucifixión de nuestro Señor.
Las lágrimas comenzaron a deslizarse por mis mejillas. Varias noches seguidas leí la misma porción. Una noche, muy tarde, me pareció que alguien llamaba a mi puerta. Creí que sería la enfermera de guardia, pero enseguida tuve otra visión del Señor Jesús, y supe que era él, que estaba llamando a la puerta de mi corazón. Sus ojos estaban llenos de compasión y de amor. Le dije que no podía dejarlo entrar en mi vida, ya que yo adoraba a Krishna, y una vez más, tercamente lo rechacé.
Pero mi hora había llegado. El Buen Pastor había hallado a su oveja perdida. Todo lo que tenía que hacer era sacarla de entre las zarzas y espinas, y tomarla en sus brazos.
El 4 de abril de 1955, a eso de las ocho de la noche, mi amiga y yo salimos a caminar. Era una noche de luna y yo podía ver con gran claridad las colinas que nos rodeaban. Mi amiga comenzó a orar por mí, y súbitamente, frente a mis ojos apareció la visión de centenares de cruces en las partes más altas de las colinas.
Y en cada cruz estaba el Señor Jesús. Creí que mi cerebro estallaría, tan violenta era mi emoción, y tan claro el espectáculo. Esa misma noche me entregué a los pies del Salvador y le recibí en mi corazón. Una extraña paz llenó mi alma, y sentí una alegría que sólo pueden entenderla aquellos que hayan pasado por una experiencia parecida.
Días más tarde el Señor me indicó claramente, por medio de uno de sus siervos, que yo debía ser bautizada. El día de mi bautismo fue una fecha memorable en mi vida.
AUDREY says
QUE DIOS LES SIGA BENDICIENDO GRANDEMENTE, SUS TESTIMONIOS ME LLENAN DE GOZO Y DE MUCHA ALEGRIA, ES COMO SENTIR LA CARICIA DEL AMOR DE CRISTO EN MI Y EN TODOS, GRACIAS POR HACERLOS LLEGAR HASTA MI, DESEO LA PAZ DE CRISTO EN SUS VIDAS, PARA QUE CON MUCHO AMOR SIGAN EXTENDIENDO SU MENSAJE.AMÈN. (AUDREY-Medellìn,Cbia.)
HECTOR GRAJALES says
hermosos testimonios acerca de jesus como actua en cada persona son de gran bendicion para otras personas para q se acerquen a nuestro SALVADOR JESUS GRACIAS POR ESTO Y RECIBAN GRAN BENDICION EN ABUNDANCIA DEL DIOS ALTISIMO HASTA LA PROXIMA
Pastor says
Dios les bendiga por la experiencia compartida, hacer ver que el verdadero nacimiento nace desde el corazón es un cambio desde dentro hacia fuera, hoy en día me encuentro con muchos nacimientos que sólo son desde fuera de apariencia semejantes a la higuera pero que dentro de tales personas no hay ni un solo fruto digno de arrepentimiento.
LEON DARIO VALDERRAMA says
LA VERDAD ES QUE ESTOS TESTIMONIOS, NOS AFIANZAN MAS LA CREENCIA DEL PODER Y EL AMOR DE CRISTO, ESTA CLARO QUE SI PERMITIMOS QUE EL TODO PODEROSO GOVIERNE NUESTRAS VIDAS, ESTAS DAN UN GIRO TOTAL, NO DEGEN DE PUBLICARLOS ESTOS NOS LLANAN DE PAZ Y AMOR EN CRISTO JESUS, QUE EL TODO PODEROSO LES BENDIGA GRANDE Y ABUNDATEMENTE.
Alvaro Eraso says
Gracias por estos preciosos testimonios que muestran el amor del Señor por cada uno de nosotros. 3 Juan 2 dice: Amado, yo deseo que seas prosperado y que tengas salud, asi como prospera tu alma. Es el anhelo de nuestro Padre Celestial.
SONIA says
REALMENTE ES UNA GRAN BENDICION PODER LEER ESTOS TESTIMONIOS………DOY GRACIAS A DIOS POR ESTE MINISTERIO——–LOS AMO EN EL AMOR DEL SEÑOR…..BENDICIONES….
Angela says
De verdad doy garcias a Dios que los dirige y puso en este equipo de trabajo la inteligencia de extender las bendiciones para todos nosotros, gracias por compartirnos estos mensajes y que Dios los siga bendiciendo día con día.
WENDY IRIARTE says
HOLA DIOS LES BENDIGA,ES MARAVILLOSO SABER QUE EL SEÑOR UTILIZA DIFERENTES FORMAS PARA HACERNOS LLEGAR A SUS CAMINOS Y CADA VEZ QUE CREAMOS NO PODER CONTINUAR,DEBEMOS RECORDAR ESE DIA QUE TUVIMOS ESE GRAN ENCUENTRO CON EL SEÑOR Y SABREMOS QUE EL ESTA ALLI PARA AYUDARNOS.GRACIAS POR COMPARTIR ESE HERMOSO DIA CON MIGO.EL SEÑOR LES BENDIGA
Silena says
HOLA DIOS LES BENDIGA.
ME PARECE ESPECTACULAR QUE LAS PERSONAS SEAN CAPACES DE CONTAR LA HISTORIA DE SUCONVERSION; PERO MAS ME LLAMA LA ATENCION LAS HISTORIAS EN COMO LO HICIERON, AVECES COMPARO ESO, CON MI HISTORIA, Y LA MIA NO ME PARECE TAN SENSACIONAL, PERO LE DOY IGUAL GRACIAS A MI DIOS, DE QUE YO TAMBIEN LO HICE, Y QUE MI DIOS TAMBIEN ME AMÓ Y TUVO MISERICORDIA DE MI.
SILENA.
Jonatan Adonias Ixtulul Guzman says
Hola DIOS Bendiga a todo lector de este testimonio es muy agradable saber que nuestra familia en Cristo sigue creciendo, se que Cristo llama a las personas de forma muy especial es algo lindo saber de que forma fueeron llamados para el nuevo nacimiento, yo en lo personal e experimentado de una manera un segundo llamado a mi vida pero fue algo sorprendente soy un joven pues aunque en prubas y luchas tengo el deseo de seguir en este camino con la meta de obtener mi SALVACION y sobre todo ver a mi SALVADOR cara a cara y poder Adorar su nombre con todo el deseo del mundo cosas similares hace Dios en cada vida pero siempre trabaja Bien Gracias al Escritor esta muy bien que DIOS lo sigua Bendiciendo grandemente Sigan Adelante que ese es el Mandato del Señor Jesucristo los amo en el Nombre de Jesucristo.
Are says
GRACIAS POR COMPARTIR VIVENCIAS MUY PROPIAS CON ESTE PUEBLO QUE NECESITA ACTIVAR LA FE DE UNA MANERA TAN ESPECIAL QUE ESTREMEZCA NUESTROS CORAZONES. EN LO PERSONAL ESTOY PASANDO POR ESE PROCESO DE CONVENCIMIENTO, DE SER CRISTIANA EN EL SENTIDO AMPLIO DE LA PALABRA Y LO QUE IMPLICA, NO NIEGO QUE AUNQUE LLEVO UN TIEMPO CONSIDERABLE DENTRO DEL CRISTIANISMO, AL ENTRAR A LA UNIVERSIDAD, MI MENTE HA PASADO POR MUCHAS DUDAS Y CUESTIONAMIENTOS ; SIN EMBARGO DESDE UN TIEMPO HASTA AHORA ESTOY EN ESA BUSQUEDA Y ABRAZANDO LA CONVICCIÓN PARA QUE SEA UNA REALIDAD EN MI CORAZÓN Y EN MI VIDA COTIDIANA, CON EL FERVIENTE ANHELO DE QUE MI VIDA MISMA SEA ADORACIÓN AL SEÑOR. LES BENDIGO POR SU TESTIMONIO QUE ME AUMENTA LAS GANAS DE SERVIR A DIOS Y SEGUIR ADELANTE AUN CONTRA VIENTO Y MAREA.
BENDICIONES DE MÉXICO AL MUNDO.
carlos says
Cada vez que participo de tus estudios, siento la llenura del Espiritu Santo que invade mi ser y me hace descargar el peso de mi conciencia, aligerando todo lo oculto y pecaminoso que hay en mi. Dios provea de grandes bendiciones para los seguidores del evangelio de Cristo. Amen.
Clara Moreno Chaves says
Me gustaría también compartir mi testimonio, pues el Señor en su infinita misericordia se apiado de mi cuando la vida había perdido todo sentido para mi, a pesar de estar casada y tener dos hermosos hijos.
Pienso que cada vez que una persona cuenta el momento de su encuentro cara a cara con Jesus, alguien que pasa por las mismas circunstancias recibe esa luz divina que puede sacarlo del hoyo profundo. Gracias y espero me indiquen como puedo contar mi conversion.
Clara Moreno Chaves, Bogotá, Colombia
RAMONITA DEL CASTILLO says
Dios es maravilloso , es amor , tenerlo en mi corazon me ha dado fuerzas para seguir luchando por mis hijas, antes sentia un gran temor por mis dos hijas, por la politica que regia en la epoca junto con la crisis economicaque atravezaban los paises latinos entre ellos Colombia,yo no veia futuro alguno para mis hijas todo lo que les rodeaba parecia incierto,ellas fueron levantadas en un matrimonio muy unido y debido a la crisis cerraron el Banco donde su papá trabajaba, obligandolo a buscar mejores orizontes, le toco irse para españa y con el correr de algunos años me separe, senti que el mundo se me venia encima, me sentia culpable vacia, por medio de una compañera de trabajo conoci a Cristo y comence a orar y a pedirle por mis hijas, Dios escucho mis oraciones y se que las seguira escuchando mi hija mayor termino en la ciudad de Bogotá su carrera de diseño grafico y enseguida consiguó empleo, a la mas pequeña se le estan tramitando los papeles por que ella decidió irse con su papá a españa para estudiar publicidad y artes, se que todo se me va a dar para mi y mis hijas , y saben por que por que el miedo desde que conoci a Cristo Jesus desaparecio y hoy todo lo que profetizo son cosas buenas, tengo plena seguridad que aun hay muchas cosas que el señor me va a mostrar,este año tengo pensado bautizarme para que sigan callendo muchas bendiciones en mi vida.
Martha L.Palacios Barreto says
HERMANOS DIOS LES BENDIGA Q’ MARAVILLOSOS ESCUCHAR Y COMPARTIR LOS TESTIMONIOS DIOS LO PUEDE TODO EL SE ENCUENTRA EN EL MOMENTO INDICADO PARA SALVARNOS PARA LLEVARNOS POR ESE CAMINO Q’ MUCHOS NOS NEGAMOS A SEGUIR PERO Q’ LINDO Q’ EL SEÑOR JESUS CUANDO TOCA LA PUERTA NADIE SE LA PUEDE SERRAR AMEN.
LA VERDAD SE LLAMA CRISTO CON EL SOMOS MAS Q’ VENCEDORES .
Domingo Castro says
vaya, y me hicieron llorar, que preciosos testimonios, quiera Dios que hayan muchos mas convertidos, que den sus testimonios para alegria y gozo del pueblo entero, gracias por estos momentos, Dios les bendiga grandemente
wilfredo says
Con tremenda emosion y reverencia he leido los testimonios de estos dos hermanos que Gracias a la garcia de la salvacion de nuestro Señor han venido a ser parte de la familia, es tremendo como Dios cambia los corazones aun perteneciendo a infinidad de religiones paganas, he derramado lagrimas emosion, es una lastima que el mundo siga ciego, pero es nuestra mision ir y predicar el evangelio porque el evangelio es poder para nosotros que creemos en el. animo hermanos, me siento contento y restaurado a cada envio de esta pagina a mi correo, siempre es bienvenida.
Dios les bendiga