Hemos visto que, bajo las órdenes de una Mente Viva, hemos sidos puestos bajo una Ley que es una Vida desenvolvente. Es preciso, entonces, que vayamos creciendo para poder permanecer cristianos.
1- Crece mediante tus errores, aún mediante tus pecados. Muchos se amilanan con una caída y no vuelven a levantarse. Pero la pérdida de un encuentro no quiere decir que este perdida la batalla. Muchísimos han ganado la batalla precisamente gracias a que perdieron una escaramuza, porque fueron mas avisados, más humildes, mas denodados. “Cuando un hombre bueno cae, cae de rodillas“. ¡Bien está! Levántate enseguida y dí: “Bueno, ese fue un porrazo, pero he aprendido la lección. Pediré refuerzos y reforzaré ese punto débil.” Puedes así hacerte fuerte en tu punto más débil. San Pablo y Juan Wesley fueron fariseos convertidos y se hicieron fuertes en lo que era su debilidad, pues se hicieron humildes y dependieron solo de la gracia divina. Si caes, no te detengas, sino que sigue adelante.
E. Stanley Jones
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