ESTRUCTURA DE LA BIBLIA
Una de las cosas notables en relación con la Biblia es sus sorprendente estructura. Ningún hombre podria por si mismo escribir un libro así, porque la Biblia no fue compilada por un autor único, en un momento particular de la historia humana, sino que fue escrita por mas de 40 personas diferentes, a lo largo de un período de 1.600 años y no obstante, es evidente que, por detrás de todo, estaba la obra de un solo cerebro unificador.
Este hecho, solo tiene explicación si aceptamos que, en su momento, Dios se reveló a cada uno de los que escribió. La mayoria de ellos no se conocían entre sí, y muchos ni siquiera sabían que había otros abocados a la misma tarea. Y sin embargo, una vez reunidos los 66 libros en un solo cuerpo, conforman un todo unido de manera casi perfecta. No resulta difícil comprender la razón de esta unidad y perfección, cuando se tiene presente que dichos hombres eran conscientes de que no hablaban o escribían por sí mismos, sino que era Dios quien hablaba por medio de ellos. Veamos el testimonio de algunos de ellos:
MOISÉS: “Y respondió Dios a Moisés: YO SOY EL QUE SOY. Y dijo: Así dirás a los hijos de Israel: YO SOY me envió a vosotros.” (Ex. 3:14).
JOSUE: “Aconteció después de la muerte de Moisés siervo de Jehová, que Jehová habló a Josué hijo de Nun, servidor de Moisés, diciendo…” (Jos. 1:1).
SAMUEL: “Y Jehová dijo a Samuel: He aquí haré yo una cosa en Israel, que a quien la oyere, le retiñirán ambos oídos.” (I Sam. 3:11).
DAVID: “El Espíritu de Jehová ha hablado por mí, y su palabra ha estado en mi lengua.” (II S. 23:2).
JEREMIAS: “Vino a mí palabra de Jehová diciendo: …Porque así ha dicho Jehová: No entres en casa de luto, ni vayas a lamentar, ni los consueles; porque yo he quitado mi paz de este pueblo, dice Jehová, mi misericordia y mis piedades …” (Ver Jer. 16:1, 5, 9, 14).
Los 39 libros del Antiguo Testamento fueron escritos en hebreo, por cuando menos 32 personas diferentes, que procedían de diversos niveles educacionales y vocacionales, entre los que se incluían sacerdotes, profetas, jueces, reyes y pastores de ganado, y en total abarcan un período de aproximadamente 1600 años.
Una de las primeras cosas que conviene hacer, al comenzar a estudiar la palabra de Dios, es aprender de memoria los libros de la Biblia, siguiendo sus divisiones naturales. Esto nos permitirá desenvolvernos con soltura cuando estemos conversando sobre las escrituras, o cuando queremos seguir un sermón o un estudio bíblico. Ello, gracias a que la memorización, nos permitirá también grabar un bosquejo mental en el orden correcto, conociendo casi exactamente la ubicación del libro que necesitamos. De este modo podremos comparar una parte de la Escritura con otras. Y desenvolvernos con eficacia en el ministerio al que somos llamados.
omar says
me encanto el estudio de la palabra de Dios, el cual me ayuda a prepararme mejor para saber que debo hacer.
benjamin says
Exelente idea la de memorisar todos los libros,pero creo mas conveniente memorsar versiculo y capitulo por capitulo por las dudas que algun poder mundial lo quite de nuestras manos, que Dios les siga bendiciendo ricamente..